
En el trabajo, que centra la tesis doctoral de Ainhoa Fernández-Atucha, han participado los investigadores Enrique Echevarría, Gorka Larrinaga, Javier Gil, Mónica Martínez-Cengotitabengoa, Ana M. González-Pinto, Jon Irazusta y Jesús Seco, investigador del Ibiomed y coordinador del Máster interuniversitario en Envejecimiento Saludable y Calidad de Vida de la ULE y la UPV/EHU, quien explica a DiCYT que los indicadores pronósticos de las enfermedades mentales son claves para mejorar el manejo clínico de los pacientes.
En el caso de la esquizofrenia, las primeras manifestaciones suelen producirse en forma de brotes psicóticos, “una desconexión de la realidad, un estado delirante con alucinaciones que incapacitan al sujeto para vivir en su entorno habitual”. Así, el brote psicótico comparte algunos síntomas con la esquizofrenia aunque no todos los pacientes con un brote psicótico terminan desarrollando la enfermedad.